Una exposición inaugurada ayer en el Círculo Mercantil rescata algunas de las imágenes, y objetos, más importantes dentro de la historia del Teatro San Fernando, sala que fue un referente en Europa
Ricardo Castillejo
Comenzó a construirse en 1845, se concluyó dos años después y se clausuró en 1969 pero, entre ambas fechas, se alzó como uno de los “templos del arte” más importantes de Europa y, por extensión, del mundo. El Teatro San Fernando nació con vocación lírica –se inauguró el 21 de diciembre de 1847 con la ópera de Verdi “I Lombardi a la prima cruciata”-, aunque, poco a poco, fue derivando hacia otro tipo de espectáculos tal y como se puede contemplar en “El Teatro San Fernando de Sevilla a través de sus artistas”. Una exposición inaugurada ayer en el Círculo Mercantil gracias al patrimonio que Emilio García Carretero ha ido atesorando durante toda su vida y que, hasta el 21 de abril, pone a disposición de una ciudad a la que quiere y admira con devoción. “Sevilla tiene tanto, tanto, tanto…”, afirmaba el organizador de la muestra para “Sevilla Magazine”. “Es el arte en sí. Siempre ha sido así. Aquí se han forjado historias como la de Ofelia Nieto, una grande de la ópera que estrenó “Maruxa”, murió con treinta años, y estuvo muy vinculada a la Hermandad del Valle, cuya virgen tiene una peana de plata regalo de la artista”.
Carretero, también intérprete de bel canto, ha sentido desde pequeño un gran amor por el mundo del espectáculo donde ha vivido grandes momentos como el de actuar en la capital hispalense, precisamente en el mismo Teatro San Fernando al que dedica esta recopilación donde conviven tanto fotografías como objetos cargados de historia. “Las piezas “estrella” son unas joyas de bisutería buena de Pepita Rollán, figura de la lírica que estrenó “La venta de los gatos” y el quimono con el que hacía “Madame Butterfly”. También es muy interesante el traje con el que Antoñita Moreno hizo “El cordón de mi corpiño” en una película”, explicaba un guía que no ha querido que la copla se alzara como hilo conductor de este más que recomendable recorrido. “Más adelante haré algo centrado en la canción española pero quería que las nuevas generaciones descubrieran a los padres de Plácido Domingo o a Amalia Molina, musa de los hermanos Álvarez Quintero que inspiró “Mariquilla Terremoto”. Me apetecía rescatar del olvido a gente de aquí como Julieta Pons, la primera en cantar el “Ay ba” de “La Corte del faraón”, o Rosario Leonés, quien hacía aquello de “El niño judío”. A pesar de eso, también están Marifé, Concha Piquer, Juanita Reina, Estrellita Castro o Nati Mistral”.
Muchos fueron, más allá, los que pisaron las tablas del San Fernando (el cual, en sus orígenes, llegó a tener un hotel para alojar a grandes artistas), pero solo una la que nació en sus entrañas: Adelita Domingo, maestra de maestras fallecida el año pasado. “No se reformó porque no le vino bien a sus propietarios y porque la administración permitió que se tirase. Una gran pena pues se dejó morir a un emblema de la cultura”. Sea como sea nos queda la memoria, ese espejo donde, dicen, se ven a los ausentes que, ahora, reviven para que todos podamos disfrutarlos… más allá de las bambalinas.
(Nota: “El Teatro San Fernando de Sevilla a través de sus artistas” estará en el Círculo Mercantil hasta el 21 de abril)