Sin duda, el 2019 va a ser un año para olvidar en la vida de Sara Carbonero. Todo empezó a ir mal cuando, el pasado 1 de mayo, Iker Casillas sufrió un infarto, algo que nos preocupó a todos pero mucho más a su familia. Pero la cosa no quedó ahí ya que, al poco tiempo, pudimos conocer que a nuestra protagonista le habían detectado un cáncer de ovario.
Tras una retirada del foco mediático para centrarse en su salud y su recuperación, la semana pasada se desveló que ya había finalizado su tratamiento de quimioterapia y poco a poco se comenzaba a ver la luz al final del túnel. Tras estas buenas noticias, la presentadora ha querido retomar su rutina de ejercicios y ha “re-comenzado” con sus clases de pilates, tal y como ha compartido con todos sus seguidores en redes sociales. Además, esto coincide con la vuelta a los entrenamientos de su marido tras el susto de mayo. Esperamos que 2020 sea un mejor año para los Casillas-Carbonero