Tras una dolorosa ruptura sentimental ya superada, la benjamina de la primera edición de “Operación Triunfo” vuelve, a sus 38 años, con “Lento”, tema que comparte con su compañera y amiga Chenoa
Por Ricardo Castillejo
Artista independiente, la gaditana Natalia continúa, dos décadas después de sus inicios en “Operación Triunfo”, una trayectoria musical a la que ahora llega “Lento”, una nueva apuesta que ella crea y produce y en la que no ha querido dejar de participar su amiga Chenoa. Conocida como la “Britney Spears” española, esta cantante afrontó la ruptura del futbolista Alex Pérez en diciembre pasado, diciendo adiós a una relación de trece años tras la que necesitó ayuda psicológica pero que, poco a poco, ya ha superado, igual que el coronavirus que pasó y cuyas secuelas casi han desaparecido por completo. Así, como una mujer renovada, la artista afronta esta nueva etapa refugiada en sus amigos, en el deporte y en una profesión en la que aún tiene muchos sueños por cumplir.
-Cuando lanzas un nuevo tema, ¿cómo se sabe cómo acertar en lo tuyo?
-Nunca se sabe. Al componer escucho mucha música y, sin perder mi esencia, voy cogiendo diferentes ingredientes para intentar llegar a todos los públicos posibles.
-Coincide tu estreno con el veinte aniversario de “OT”… ¿Han pasado rápido estos veinte años?
-Ni me he enterado. Aún recuerdo el olor de la Academia y los castings. Cuando voy por el edificio en Sevilla donde se hicieron me sigo poniendo nerviosa… Fue una experiencia tan increíble que parece que fue ayer. Es cierto que en este mundo no te da tiempo ni a vacaciones y no puedes ni planear nada. Y luego, algo que nunca he dicho, en esto siempre parece que estás esperando algo. Llegar al número uno, ser viral… Empiezas a planear futuro y todo se va de forma fugaz. Llevo un año y medio decidida a no agobiarme. Lo que tenga que suceder, sucederá.
“Tenía el ansia de intentar cruzar el charco y me entraban hasta pataletas de niña pequeña… A día de hoy cada logro es un éxito”
-¿Consideras que has encontrado el triunfo?
-Son veinte años viviendo de la música, como intérprete y autora, y de la televisión como presentadora. Sueñas con llegar a Estados Unidos -algo que logran muy pocos-, pero, cuando ves que estás a punto de alcanzar los 40, lo que quieres es tener una tranquilidad y una estabilidad.
-¿Has sentido el paso de niña a mujer?
-Mucho. Tenía el ansia de intentar cruzar el charco y me entraban hasta pataletas de niña pequeña… A día de hoy cada logro es un éxito. Cada visita de Youtube, cada persona que retuitea mis videoclips… Así se es más feliz.
-En estos últimos tiempos la vida te ha dado palos como el fallecimiento de Alex Casademunt…
-“Operación Triunfo” ya no va a ser igual. Que nos falte un pilar tan fundamental… Siempre seremos 16 pero la ausencia será muy grande. Era la alegría de la huerta, inquieto, divertido… Un gran artista. Me da mucha rabia que no se le reconociera. Tocaba la guitarra, la batería, componía…
-También has sufrido el Coronavirus…
-Llevo un año sin olfato y no sé qué hacer. Lo cogí en agosto del año pasado y sigo igual… Hay mucha imprudencia. Mi hermana ha estado diez días con la variante Delta y hemos sentido miedo por ella. Los negacionistas que piensan que esto se ha inventado me dan pena.
“A veces seguimos con alguien por pena o cariño o porque te da miedo la soledad, pero, cuando lo dejas, te sientes más fuerte que nunca, contenta, madura, valorando más todo”
-Y por si fuera poco, ruptura sentimental…
-No pasa nada. Al principio lo pasé realmente mal porque son muchos cambios. Vas de la monotonía a quererte, cuidarte, no depender de nadie para nada… Soy una chica que he estado toda la vida con pareja y ahora que estoy soltera me encuentro bien. A veces seguimos con alguien por pena o cariño o porque te da miedo la soledad, pero, cuando lo dejas, te sientes más fuerte que nunca, contenta, madura, valorando más todo… Las cosas se van apagando y a día de hoy le deseo lo mejor.
-¿Abierta al amor?
-Con mayúsculas. No soy nada rencorosa. Cada persona es un mundo y lo que quiero es vivir, amar, que me amen… Lo quiero todo. Todo el mundo me dice que desprendo más luz que nunca.
-¿Y de Chenoa qué me cuentas? -Para mí es como mi hermana. La quiero con toda mi alma y, como se ha venido a vivir cerca de mi casa, eso nos ha unido mucho. Hacemos deporte, vemos la tele, tenemos nuestra charlita… Le enseñé “Lento”, que está compuesta por mí, y me ayudó a salir de un atasco y hasta hacer un guiño en ella. Nunca habíamos cantado juntas y, aunque no sea un dúo, nos apetecía hacerlo.
