La cantante -inmersa tanto en su música como en la promoción de su firma de ropa, “Chochete”- protagoniza una de las polémicas de la semana al subir a su Instagram un vídeo llorando por los árboles de su jardín con los que ha acabado el temporal, “Filomena”.
Por Ricardo Castillejo
Es consciente de que lo mismo puede gustar, que no pero, sea como sea, lo que Soraya Arnelas no consiente son las faltas de respeto. Por eso no tiene inconveniente en contestar a los “haters” que, a través de las redes sociales, pasan los límites de la opinión hasta terrenos más ofensivos y sangrantes. Nuestra entrevistada es una mujer valiente, hecha a sí misma, que piensa en otras posibilidades laborales, más allá de la música, como el diseño de ropa a través de una firma, “Chochete”, inspirada en su hija, Manuela. Todo un universo de posibilidades del que hablamos con ella después de un año, 2020, durante el que se frustraron sus planes de un enlace, con el sevillano Miguel Ángel Herrera, que, tarde o temprano, se terminará celebrando…
-Eres una mujer más de trabajo que de suerte, ¿verdad?
-Sí, pero también he tenido suerte. Sobre todo, cuando hace quince años entré en “Operación Triunfo”. Había muchos candidatos y me tocó a mí y fue un empujón importante, aunque luego no me lo han puesto nada fácil.
-La verdad que te lo has currado, algo muy de los Virgo, como tú, que también suelen ser muy cuidadosos con la imagen… ¿Recuerdas cuántos “looks” has usado a lo largo de tu carrera?
-No, no… He tenido el pelo largo, corto, me he rapado la cabeza, he estado, creo, pelirroja… Y tengo hasta más de 50 pelucas. Soy una inquieta y curiosa y me aburro con facilidad de las cosas. Al comienzo de los proyectos me ilusiono mucho pero después, esa pasión se me quita pronto. Me considero una aventurera a la que le gusta conseguir lo difícil.
-En una trayectoria larga como la tuya hay luces y sombras… ¿En qué punto te encuentras?
-En uno de curiosear, de abrir nuevas vías… Como no puedo subirme a un escenario, aunque tenga un álbum que saqué en la pandemia, puedo invertir mi tiempo y mi energía en otras ideas como la de la ropa, u otras que tengo en mente. Te asaltan ganas de darle la vuelta a todo y hasta me he visto componiendo para otros artistas géneros que no había tocado nunca.
“Con Miguel Ángel, por primera vez me he sentido libre en una relación. Cuanta más libertad das en una pareja, más vértigo y más unión existe y nace ese pequeño miedo de que se te pueda ir, que tú compensas con cuidados”
-Acabas de grabar “Rompecabezas” con Chenoa. Dos ex concursantes de “OT”, dos mujeres muy famosas, dos signos compatibles -Laura es Cáncer-… ¿Existe eso que se llama destino?
-Yo lo he vivido en muchas ocasiones y parecen casi milagros. Por ejemplo, cuando llegué a Madrid, y me presenté a castings, algo me estaba diciendo que no era el momento, que tenía que esperar a tener más experiencias para poder sacar lo que llevaba dentro como cantante y como actriz también, puesto que, para transmitir según qué emociones, necesitas esas vivencias.
-La letra de ese tema habla de una relación tóxica…
-Sí. La pasé hace muchos años pero, curiosamente, aquella persona fue la que me empujó para ir a “Operación Triunfo”. Me robaba la vida y, a la vez, me la daba. Son relaciones que entiendes más con la distancia, pero fue un capítulo más del que aprendí mucho, a pesar de que, como sucedió, tenía que terminar.
-Porque tú, cuando te entregas, te entregas…
-Totalmente. No sé entregarme al cincuenta por ciento. La vida es todo o nada y no me gusta esa sensación de haber podido hacer algo más. No sé ser de otra manera y prefiero llevarme un batacazo. Muchos tienen miedo a caer, a las derrotas, pero de ahí surgen las mejores oportunidades. Yo, desde muy joven, he sido una muchacha muy libre y he disfrutado y mis padres me han dejado equivocarme.
-Dentro de ese destino que mencionábamos estaba Miguel Ángel, tu hija, Manuela… ¿Son tus dos pilares, junto a tu profesión?
-Sí, pero tengo más. La familia es esencial, igual que el trabajo. Si no estoy contenta, en este sentido, se refleja en mi carácter, aunque, en estos instantes, es esencial la salud mental. Estar lúcida, tranquila, tener ilusiones… Eso se ha convertido en algo imprescindible, y más desde la pandemia.
“Quienes intentan hacernos daño en redes son problemáticos, problemas en sí mismos. No son conscientes de lo que hacen porque están mentalmente desequilibrados”
-2020 iba a ser el año de tu boda…
-Sí, pero se canceló. No me quiero casar así… Nunca he sido de casarme, pero tomé la decisión de hacerlo con la idea que tenía en mi cabeza. Por la Iglesia, porque soy creyente y porque solo me voy a casar una vez en mi vida y va a ser con el padre de mi hija y, como no puede ser como deseo, prefiero esperar un poco más.
-¿Qué has encontrado en Miguel Ángel que no hayas tenido antes?
-La libertad. Con él, por primera vez me he sentido libre en una relación. Cuanta más libertad das en una pareja, más vértigo y más unión existe y nace ese pequeño miedo de que se te pueda ir, que tú compensas con cuidados. Discutimos, pero él me sabe llevar. Me deja gritando como una loca y ya está (risas).
-¿Y de “Chochete”? ¿Qué me cuentas?
-Pues que surgió con el confinamiento, cuando nos hemos dado cuenta de que hay que reforzar los valores. Mi hija ha traído color y luz a nuestro camino y eso lo hemos querido reflejar en esta firma de ropa. Fíjate que hace bastante dije que no me gustaba que una madre y una hija fueran vestidas iguales y me he tenido que tragar mis palabras con esta iniciativa (risas).
-¿Te ves en la música para siempre?
-Sí, aunque no tengo claro si de una manera protagonista. No tengo problemas con mi ego ni necesito para vivir ni el aplauso, ni los focos. Cada día me decepcionan más cosas que veo en mi mercado musical. Cuanto más sé, más me decepciono. Tengo mi sello discográfico y me gustaría ayudar a otros. Incluso, cuando me dicen que Manuela va a ser artista -y me va a quitar mi sitio-, me encanta. Mientras mayor me hago, y tengo 38 años, más tranquila estoy sin tener que escuchar ni ver tanto. Soy feliz con lo que tengo.
-¿No te da pena tener una hija única?
-Claro. Ojalá pueda hacerlo este año. Soy hija única y no siempre ha sido fácil. Por eso no quisiera que la mía lo fuera…
-Por cierto, ¿te llevas mejor con los haters?
-Imposible. Es gente enferma y yo sé lo que es tener alguien enfermo en mi familia. Quienes intentan hacernos daño en redes son problemáticos, problemas en sí mismos. No son conscientes de lo que hacen porque están mentalmente desequilibrados y por eso, sin miedo ninguno, es mejor bloquearlos.
