La venezolana, que acaba de lanzar al mercado su perfume, “IR” by Ivonne Reyes, se confiesa una enamorada del verano al tiempo que se desvela como una mujer positiva y una madre incondicional
(Fotografía de portada con vestido rojo por Puro Garbo)
Ricardo Castillejo
Es una de las mujeres más deseadas de nuestro país y, más allá, una persona cargada de una increíble energía positiva con la que es un auténtico placer trabajar. Ivonne Reyes, a sus 45 años, sigue conservando intacto su enorme atractivo que le hace, vaya donde vaya, ser el centro de todas las miradas. Perfumada con “IR”, el agua de colonia que Ivonne acaba de lanzar al mercado -y que, mezcla de varias esencias, constituye un soplo de aire fresco- y vestida por firmas como Sofía Rivera, María de Cárdenas, Puro Garbo o “LiveInEmotions”, la presentadora y actriz desplegó, para el número de Julio-Agosto de nuestra revista impresa, sus no menos importantes dotes como modelo en un encuentro difícil de olvidar…
Ivonne Reyes vestida por Live In Emotions en un momento de la sesión fotográfica.
-¿Cómo surgió la idea del perfume? ¿Lo llevaba pensando desde hacía mucho?
-Bueno, hace tres años empecé a darle vueltas y a imaginar cómo sería todo. Creé el “spot”, le di forma a lo que quería transmitir, el aroma… Para mí los olores son muy importantes. Cuando no he estado muy bien, me ha ayudado mucho a cuidarme tanto el deporte, mimar el físico como oler bien. De hecho, hay ciertos perfumes que pueden subirte el ánimo y éste mío, por ejemplo, tiene cítricos (que elevan la autoestima, limpian y aportan frescor), madera de cedro, canela… A la perfumista (nariz) le resultó muy fácil porque lo tenía todo muy claro aunque he ido con calma. Sin saberlo escogí las esencias que venían de Grasse (Francia), que es de donde se hacen los mejores perfumes del mundo. Luego haces varias combinaciones y tienes que dejarlo reposar para medir qué hace falta y qué sobra. Es muy bonito pero complicado y, por si fuera poco, queda el bote, el tapón…
-Porque, Ivonne Reyes, ¿a qué huele?
-A optimismo, a no tener límites, al mar unido al cielo en su punto final…
-Se le nota muy espiritual…
-Mi madre lo era y mi familia nos inculcó eso. La vida es una y hay que explotarla. A veces se cometen errores pero sin ellos no sabes avanzar. Hay que inyectar energía y rodearse de buena “onda”.
-¿Y si se siente mal?
-Me pongo tacones (risas). Necesito el mar. Me da fuerza. Conectar con la arena y el sol me da mucha vida. Cuando miras alrededor te das cuenta de que hay muchos que se superan aún pasándolo muy mal. Yo no me puedo quejar. Es normal que tengas bajones pero me duran cuarenta y cinco minutos (risas). Para eso me pongo música, me doy una buena ducha, huelo rico…
-¿Cuál es la razón de su eterna juventud?
-Eso se lleva dentro. Yo soy muy transparente y es algo que depende de si tú estás bien o no. Aparte me gusta cuidarme, hacerme tratamientos de belleza (caseros o en centros especializados) como cócteles de vitaminas, limpiezas… Todo eso ayuda. Últimamente he descubierto el plasma para el pelo que da un brillo que había perdido un poco. Es increíble… Hay que mimarse.
-¿Usted es consciente de lo que provoca en los hombres? ¿Sabe el poder que tiene sobre ellos?
-(Risas) Gracias por lo que me dices pero no me siento así. Me considero físicamente normal… A mí me gusta gustarme y, si es así, creas como un magnetismo que provoca atracción.
-¿Cómo le gusta que huelan ellos?
-Bien (risas). En la línea de “IR”. Que no empalague ni te maree. Es un poco reflejo de ti…
-Porque, el amor, ¿qué olor tiene?
-A fresco, a verde, a tierra mojada, a canela, a menta…
-¿Es enamoradiza?
-No mucho. Supongo que va con la edad. Cuando eres joven te enamoras y escribes cartas y lloras… Luego ejerces de madre y, aunque no sea igual, te enamoras de tu hijo. En lo otro estoy más “chapada a la antigua”. Como Escarlata O´Hara (risas).
-¿Es de las que, cuando dicen que “no” es que “sí” y al contrario?
-Antes puede ser que sí. Ahora es lo que hay. Es más fácil y menos rollo (risas).
-¿Se ha vuelto menos pasional?
-No, hombre. Sigo siéndolo pero, al ser mamá, cambia la escala de valores y tienes otras responsabilidades. Te vuelves más recelosa con tu tiempo. De joven tienes todo el tiempo del mundo y das el cien por cien pero la vida no es para toda la vida…
-¿Qué le pide a un aspirante a su corazón?
-Que sea buena persona, que pueda tener conversaciones con él y estar a gusto, poder desahogarte… Ésa es una señal de que todo está bien.
-¿Está bien en este terreno?
-Sí. Muy tranquila. Centrada en el trabajo y en disfrutar cuidándome. Necesito tiempo, tiempo, tiempo…
-Pero, ¿no le apetece enamorarse?
-De momento no apareció nadie pero, si así fuera, fenomenal y, si no, también está bien. He tenido la suerte de haber estado casada pero tampoco es algo necesario. El estado ideal es estar en pareja aunque, como te digo, no hace falta el matrimonio. Es divertido pero tiene sus rollos…
-Cambiando de asunto… Su niño, ¿a qué huele?
-¡A amor! (risas) ¡Es un bombón de chocolate!
-¿Es madre-amiga o madre a secas?
-Hay buen rollo. Hacemos buen equipo. Nos reímos mucho… Es otro mundo diferente.
-Puede presumir de años bien cumplidos pero, ¿qué ha aprendido de la vida?
-¡Uy! ¡Apenas nada! Cuando crees que has aprendido algo, te dan una bofetada en toda la cara y ves que te habías equivocado… En todo caso valoro más cosas que antes no veía, vas enriqueciéndote como ser humano…
-¿Le preocupa lo que opinen de usted?
-No mucho. Entiendo que, estando cara al público, es lógico que se formen opiniones y se hable. De mí han dicho que soy frívola, superficial, simpática, boba… No me esfuerzo en cambiar porque siempre está mi base de Ivonne. Lo que sí me emociona que me digan que soy buena madre o que soy buena persona. Eso da “subidón”…
-¿Y el verano? ¿Qué le provoca?
-Me apasiona su color… Y que no haya colegio… ¡Así puedo despertarme a las ocho en vez de a las siete! (risas). Ten en cuenta que soy madre, padre y todo…
-Tenga cuidado con los paparazzis… Su relación con la prensa del corazón, ¿bien?
-Sí. Lo que pasa es que, cuando llegué a España, hace 21 años, no existía esta revolución de hoy día. Ahora parece como una ensalada mixta en la que hay periodistas, comentaristas, artistas… (risas). Yo respeto todo aunque, en ciertos momentos, he acudido a mi terapeuta para que me echara una mano. Lo hago desde jovencita y lo recomiendo porque, al final, de lo que se trata siempre es de buscar la parte positiva.
Editorial Agradecimiento: Manuela Montes, M&M Expression Fotógrafo: Antonio Cid Producción: Pepo Rocha y Josan Muñoz Estilismo: Javier Mascareña Vestuario: Sofía Rivera, María de Cardenas, Puro Garbo, Live in Emotions