La cantante llega mañana a los 46 años con un “look” renovado y entre rumores de un acercamiento a Ben Affleck
Desde que se diera a conocer, “JLo” ha ido labrando una carrera que suscita el interés de todo el mundo haga lo que haga. Y por eso un simple “selfie” acompañado del comentario “Cabello corto, no me importa” mostrando su nuevo “look” bastó hace unos días para que la neoyorquina fuera “trending topic”, causando sensación entre su legión de seguidores. Si a eso lo sumamos que su vida sentimental es como para escribir una novela, la fórmula secreta para ser una de las artistas más populares de la última década queda al descubierto.
Tras una temporada “tranquilita”, vuelve a la crónica social por los rumores de ser la tercera en discordia en el divorcio de Ben Affleck y Jennifer Garner, aunque también hay quien asegura que nuestra cumpleañera no ha tenido nada que ver en el punto final del matrimonio de una década entre el actor y la madre de sus tres hijos. Por otro lado, una fuente confesaba al periódico “The sun” que Jennifer y Ben, que fueron pareja, no dejaron de coquetear en los pasados Óscar y se han mantenido en contacto vía correo electrónico todos estos años, por lo que algunos de sus fans han visto la oportunidad perfecta para que la cantante retome su romance con quien ha definido en varias ocasiones como “su gran amor”. “Cuando se rompió nuestro compromiso, sentí que me habían arrancado el corazón del pecho”, revelaba la propia intérprete en su libro de memorias “True Love”.
Una biografía ésa en la que se conoce más de esta también actriz, bailarina, productora discográfica, diseñadora de moda, empresaria o coreógrafa nacida en Nueva York el 24 de julio de 1969 que, a pesar de la gran andadura realizada, no fue hasta pasados los veinte años cuando tuvo su primer trabajo bailando y, poco después, actuando. Su debut como protagonista llegó con la película “Selena”, que la convirtió en la primera actriz latina en ganar un millón de dólares y con la que fue nominada al Globo de Oro. Sólo un año después logró cobrar dos millones y realizar una de sus mejores actuaciones hasta la fecha en “Out of sight”, justo a George Clooney.
En lo que a la música se refiere, la intérprete se inició con su disco “On the 6”, convirtiéndose de inmediato en un fenómeno que vendió siete millones de copias en todo el planeta y con el que se presentó como una figura capaz de hacer todo. Tanto que, con el lanzamiento simultáneo de su segundo álbum de estudio, “J.Lo”, y su película The Wedding Planner en 2001, López se convirtió en la primera persona en tener el puesto “número uno” en el cine y en las listas de ventas en la misma semana, récord que nadie le ha quitado todavía. Es más, con sus primeros nueve trabajos ha vendido más de 75 millones de copias, siendo la persona más rica en Hollywood de ascendencia latinoamericana, con una fortuna estimada en 150 millones de dólares.
Pero la que fuera elegida como “la mujer más bella del mundo” por la revista “People” en 2011 tiene una trayectoria sentimental que ha hecho que la conozca también otro tipo de público. En su participación en “Asalto al tren del dinero” quedó prendada de Wesley Snipes, junto al que mantuvo un romance más allá de la gran pantalla. Sin embargo fue Ojani Noa quien consiguió llevarla al altar, que se vistiera de blando y le jurase un amor eterno que sólo duró once meses porque, según Ojani, JLo le había sido constantemente infiel, incluso con el rapero Puff Daddy, su siguiente conquista. En esos tiempos Jennifer aún lucía unos estilismos que dejaban mucho que desear, lejos de la imagen que presentó tiempo después cuando contrajo matrimonio con su compañero de profesión Chris Judd, con el que también estuvo casada menos de un año para dar paso al citado Ben Affleck. Dos tan guapos, tan perfectos… pero que no resistieron los rumores de esos “cuernos” que desestabilizaron su vida hasta que Marc Anthony, amigo de muchos años, le trajo la tranquilidad durante ocho años y le dio unos hijos que le hicieron serenarse en su faceta de madre… Luego todo terminó también con él y llegó Casper, el bailarín más de dos décadas menor con el que no faltaron peleas y reconciliaciones que le han traído hasta la actualidad. ¿Habrá llegado, por fin, la serenidad a su vida? Mucho nos tememos que, si así ha pasado, pronto volverá a dar que hablar…