Los diseñadores presentan su nueva colección el 10 de octubre en el Antiquarium de la Encarnación dentro de la pasarela “Del Sur”, donde demostrarán por qué su firma, Misura Costura, se ha convertido en un referente de la moda en nuestra ciudad.
Ambos tenían amplia experiencia en el diseño textil y la ilustración de moda pero fue en 2004 cuando decidieron unir sus talentos para crear “Misura Costura” como firma para la confección a medida. Una década de trabajo durante la que Diego se ha dedicado más a la parte técnica y el patronaje al tiempo que Vicente se encargaba de la faceta creativa. Dos artistas que, pese a venir de “mundos opuestos”, han sabido aprovechar esas perspectivas discordantes para encontrar un equilibrio en el que cada vez coinciden en más cuestiones y que da como fruto unas prendas artesanales y únicas que son del gusto de la mujer sevillana.
-¿Cuál podríamos decir que es vuestro estilo?
-Los clásicos renovados, con su punto de tendencia pero no muy marcada. Hacemos prendas muy ponibles que realcen la belleza de la mujer. Hay que estar pendientes de las pasarelas pero los que realmente trazan lo que va a llevarse son los fabricantes de tejidos, innovando en texturas y estampados que ya luego cada cual se lleva a su terreno. Solemos echar un ojo a la “alta costura” de París, donde se hace mucha ceremonia.
-Teniendo en cuenta eso… ¿Qué se llevará la próxima temporada?
-Es el momento de los tocados y los complementos, y para el vestuario tejidos nobles en tonos más sosegados. Creo que existen dos líneas diferenciadas: por un lado los conjuntos ajustados inspirados en los años 40 y otra, mucho más del tipo de la costa azul francesa, con confecciones más sueltas, un punto de seda y oro, mucho oro.
-¿Será lo que veamos en vuestro desfile del día 10?
-El contexto será el de finales de los 60, con inspiración de las grandes divas, sobre todo Mina. Apostaremos por un “look” muy andrógino, sin cejas, con bisutería muy excéntrica y tocados. Las prendas muy definidas. Nos gusta que la clienta llegue a visitarnos y se vaya vestida por completo, incluyendo bolsos y zapatos. Es algo que la mujer de aquí solicita mucho para evitar complicaciones.
-¿En qué falla y en qué acierta la sevillana con respecto a la moda?
-Es un público muy exigente en cuanto a los acabados. Busca buena confección y mantener una imagen impecable. En el lado opuesto estaría que es muy conservador y, para arriesgar un poco, hay que convencerle, que no es fácil. De todos modos nunca terminas de acertar. A veces hacemos cosas súpercomerciales que no funcionan mientras que otras que son más vanguardistas sorprenden y se venden rápidamente. En verano en el Sur es difícil optar por mangas largas y colores oscuros y sin embargo han tenido bastante éxito.
-Porque, puestos a elegir… ¿A quién vestiríais?
-A Nieves Álvarez. A Pilar Rubio la estuvimos vistiendo para televisión y también es un físico muy agradecido. Fue increíble también poder trabajar con Mónica Naranjo, quizás de las pocas artistas que nos hacían especial ilusión. Nos gustan las mujeres como ella, con carisma, seguridad en sí mismas, elegantes y rotundas, sin medias tintas.
-Y en el terreno nupcial, ¿qué preferís?
-Que no vayan excéntricas. No queremos disfrazar a la novia, aunque se tienda mucho a eso. No debe confundirse boda con circo y es erróneo creer que por llevar más vas a ir más mona.
-¿Por qué hay ahora tantos diseñadores?
-Parece que se ha extendido una ola de creatividad y eso está muy bien. Ésta es una profesión muy efímera y más en estos tiempos que corren donde, sobre todo, hay que ser buen empresario. La costura es cara y podríamos dedicarnos solo a hacer maravillas pero… ¿de qué sirve un escaparate de ensueño y una caja vacía? Es un oficio muy sacrificado y muy desagradecido porque no se ven las horas de implicación que lleva detrás. La nuestra es una producción cien por cien sevillana. Ahora llevamos bordados hechos a mano por “Paquili”… Nadie sabe lo costoso que puede ser eso. Luego está quien coge una pistola de silicona y ya se siente diseñador de tocados.
-¿Terminará algún día de despegar la moda andaluza?
-Tenemos buenísimos creadores pero es necesario que haya una pasarela única donde mostrar lo que hacemos, no diecisiete. Habría que unificar las muestras porque es un “galimatías” tremendo que cambia cada año por competencia directa entre los organizadores. Muchas asociaciones diferentes, administraciones que no llegan a acuerdo… Pienso que habría que replantearse muchas cosas.