Con su nuevo tema, “Lo juro”, reivindica la importancia de ser uno mismo algo que, para la sevillana Nya de la Rubia, es, a sus 34 años, un objetivo vital. Hoy nos acercamos a la cantante, y actriz de series como “Mar de plástico”, para conocerla mucho más de cerca
Por Ricardo Castillejo
Impecable, como buena Virgo. Nya de la Rubia es una bella mujer y, sobre todo, una persona elegante, más allá del vestir, en su dulce forma de ser bajo la que, no obstante, encierra una férrea voluntad. En su trayectoria, temas como “Callejuelos”, “Tú me matas” -a dúo con Rasel-, o “Ya no puedo más”, banda sonora de la serie “Mar de plástico”, en la que daba vida a la guardia civil Lola Requena. Y es que la interpretación es la otra faceta profesional de esta sevillana cuya nueva aventura es “Lo juro”, avance de un trabajo que nos la devolverá al panorama musical más auténtica que nunca.
-Con Rosalía, de la que hablas en “Lo juro”, ha habido un “boom” de las fusiones en el flamenco, pero esto es algo que se venía haciendo desde hace mucho, ¿verdad?
-Claro, en mi primer disco, del que hace ocho o nueve años, ya hacía esa fusión y, antes de mí, otra mucha gente. Claro que con ella se ha popularizado más, pero era algo que ya existía. Al final, es fruto de muchos ensayos y también de dejarte llevar hacia nuevos sonidos. De hecho, la primera vez que me subí a un escenario fue todo absolutamente improvisado.
-¿En la vida también te dejas llevar así de libre?
-Sí. Soy muy mental, pero, a la vez, fluyo.
-¿Y dónde te gustaría llegar? Porque tienes varios frentes abiertos…
-Desde siempre ha sido así. La interpretación y la música son dos profesiones muy parecidas unidas por el arte. En mi caso, no me imaginaba cantando porque no nací con ese don y ni se me pasaba por la cabeza, pero lo amo tanto que no me veo en otro lado.
-¿Se castiga en España al artista multidisciplinar?
-Mucho. En vez de valorarlo, y reconocer sus cualidades, es todo lo contrario. A mí me ha costado mucho que, cuando piensen en Nya de la Rubia, lo hagan en una cantante y en una actriz. Aquí o eres una cosa, o eres otra.
-Para triunfar, muchos compañeros tuyos terminan convirtiéndose en personajes…
-Yo no lo soy. Soy yo. Es una elección muy personal y, en mi caso, lo demuestro en “Lo juro”.
-El videoclip se rodó en una cárcel… ¿Te has sentido presa de algo?
-Sí. Es una metáfora de cómo se encarcela el arte.
-Y llega en un momento en el que estamos literalmente encerrados…
-Nos subimos por las paredes, deseando que termine esto. Como he estado muy inmersa en el proyecto no lo he notado mucho, pero está claro que se necesita ya la energía de los espectáculos.
“No subiría a las redes un beso porque hay asuntos más privados. Mi vida amorosa no influye en el arte”
-Al menos tenemos el escape de las redes sociales… ¿Cuál es tu límite ahí?
-Dependo de mis seguidores y me gusta hacer directos con ellos, conocer sus opiniones y contestarles… Cuidarles, en una palabra. Lo que no vivo para el teléfono porque sería no vivir la vida.
-Si tienes pareja, ¿la subirías?
-No. No subiría un beso porque hay asuntos más privados. Mi vida amorosa no influye en el arte. Mejor dejar aparcada esa historia… Diferente es que me casara, pero no creo que interese si llevo con alguien cuatro años o nos acabamos de conocer.
-¿Te atrae el matrimonio?
-Casarme, la ceremonia no me hace una especial ilusión, pero sí me gustaría tener familia. En todo caso haría algo en la playa…
-Eres Virgo y, por tanto, perfeccionista, ¿verdad?
-Mucho. Y conforme ha pasado el tiempo, más. Me identifico mucho con mi signo. Soy ordenada, limpia… Claro que, si te exiges tanto, puedes hacerte daño y, a la persona que tienes al lado, también. Eso no es bueno, pero hay que saber llevarlo.
-¿Te sientes profeta en tu tierra?
-No. Para nada. Ni en España, ni en Andalucía. No es una espinita, pero sí que aquí hay mucho arte y, tal vez por irme con 20 años fuera, ni se sabe que soy de aquí. Y mira que lo recalco porque, más sevillana y más trianera…