La modelo y empresaria ha disfrutado este pasado fin de semana de la nieve de Sierra Nevada acompañada de sus hijos y de algunos amigos como la relaciones públicas Silvia Peris
Ricardo Castillejo
Es una apasionada de los deportes y, desde hace muchos años, practica esquí siempre que tiene oportunidad. Por eso, para la sevillana Raquel Revuelta, ha sido un auténtico placer poder disfrutar de un divertido fin de semana en Sierra Nevada donde, aprovechando los últimos días de la temporada de esquí, ha dejado claro que está en plena forma. Madraza de sus tres hijos, Claudia, Miguel Ángel y Nicolás, la modelo y empresaria se ha sincerado para nuestra revista –que también fue invitada al viaje-, sobre un presente que, como a todos, también le afecta laboral y personalmente.
-¿Desde cuándo viene esta afición suya a esquiar?
-Desde 1986. Mi hermano mayor era muy aficionado y yo me venía con él a Sierra Nevada. Como me gustan los deportes de riesgo y superación, me apunto a un bombardeo. Me motiva aprender, dar saltos, la sensación de libertad que da el esquí y que no da otra actividad. Luego he pasado por todos: tenis, gimnasia y, en la última etapa, pádel y golf.
-Lo que pasa es que son aficiones un poco caras, ¿no?
-Depende. Puedes venirte con doce a un apartamento con literas o en otro plan. Puedes adaptarlas a tu bolsillo.
-¿Es usted más hormiga o cigarra?
-Hormiga, sin duda. Siempre me lo ha dicho mi madre y, aunque de vez en cuando me dé algún capricho, para mí soy más ahorradora.
-A ver, algún lujo que se haya permitido últimamente…
-Pues este viaje a Sierra Nevada (risas). No lo tenía previsto y tengo que darle gracias por él a mi amiga Silvia Peris y, en general, a todos los del lugar, que me han tratado muy bien. Me encanta viajar porque eso me permite desconectar. Además suelo hacerlo en compañía, porque los momentos agradables hay que compartirlos. Soy una persona curiosa y la vida para mí es un continuo aprendizaje.
-Está claro que tiene una forma física envidiable… ¿Hay secreto?
-Bueno, la verdad es que mis padres son deportistas y he heredado una buena estructura porque comer es algo que disfruto mucho y a lo que no renuncio. Eso sí, prefiero la verdura a los dulces, por ejemplo.
-Cambiando de tema… ¿El trabajo?
-Como todo el mundo. Está todo muy difícil y, el panorama televisivo, no me seduce. Estoy centrada y concentrada en mi empresa, que es lo que me aporta estabilidad, y con proyectos ilusionantes a la vuelta de la esquina. Por suerte, o por desgracia, siempre tengo la necesidad de hacer cosas nuevas. Eso satisface mucho pero es un gasto tremendo en todos los sentidos pero ya me he aceptado como soy y soy responsable de un equipo con el que llevo veinte años. Lo mismo me apetecería hacer un programa de “tele” de moda que es algo que estoy ideando.
-Porque, en lo personal, ¿qué pide?
-Tranquilidad, que pasa porque mis hijos estén bien en todos los aspectos…
-¿No ha alcanzado el equilibrio ése del que habla?
-Soy bastante equilibrada pero aún tengo episodios por resolver y eso me hace titubear en muchas situaciones. Sea como sea, ¡me encanta la vida!
Una estancia inolvidable
El equipo de “Sevilla Magazine” acompañó a Raquel Revuelta invitado por la estupenda relaciones públicas Silvia Peris quien, como siempre, no descuidó ni un detalle de una estancia durante la que pudimos esquiar gracias a la colaboración de Cetursa, empresa de la que depende la Estación de Sierra Nevada, a los equipos de Riosport-Intersport y a las clases de Javier y Jesús, profesores de la prestigiosa escuela Iliberis (propiedad de Rafael Almagro). Alojados en los fantásticos apartamentos Montegorbea (www.montegorbea.com), pudimos degustar los exquisitos platos del Restaurante Casablanca o del japonés Kotobuki Ski, donde fuimos atendidos por el amable Paul Sgutt, especialista en cocina del país del sol naciente. Al final, brindis en N´ICE, gastrobar situado en la Plaza de Andalucía, invitados por Alejandro, propietario del Clicquot Nevada Terrace (restaurante ubicado en las mismas pistas del río que podemos conocer a través de la página web, www.ilovesierranevada.com). Todo fueron atenciones que no hicieron más que reforzar una idea… ¡hay que repetir!