Vive en la calle Orfila, es camarero y vestidor de la Virgen del Parasol y, por un leve accidente “cofrade”, se convierte en el Capitán Nazareno, primer superhéroe hispalense y adalid de la convivencia entre la tradición y la modernidad de la ciudad. Un personaje de cómic, creado por el moronense Agustín Barrera, quien se prepara para dar el salto a las webseries

J.L. Rocha Bustamante

El “padre” del Capitán Nazareno es licenciado en Bellas Artes en la especialidad de Pintura y Diseño. Desde muy pequeño, Agustín Barrera supo que su vocación estaba junto a pinceles, óleos y acuarelas y comenzó a plasmar su arte en la Semana Santa, otra de sus grandes pasiones pese a no ser creyente. Fruto de esta afición, que su hermano y compañero de fatigas Jesús la define como “obsesión”, capirotes y lunares caminan de la mano de Agustín por diferentes concursos y exhibiciones que le han otorgado, entre otros, un premio en el Primer Concurso de Arte Joven de la Junta de Andalucía en 2006 por su serie “Abril”. Más allá, con el objetivo claro de disfrutar y divertirse con su arte, afronta con ilusión el salto a la pantalla del ordenador de su creación más popular.

-¿Cómo nació el Capitán Nazareno?

-Fue por el año 2004. Mi hermano solía hacer de modelo para mis cuadros y, en cierta ocasión, quería pintar un futbolista con el capirote puesto. Cuando lo vi disfrazado, con las calzonas puestas encima del vaquero, pensé que tenía aspecto de superhéroe e hice un cuadro pop con esa temática. Entonces el público comenzó a preguntar por este superhéroe nazareno pero no sería hasta la Semana Santa de 2011 cuando colocamos el cuadro en el escaparate de “El Gato en bicicleta”, la librería de mi hermano. La gente se interesó tanto que decidimos lanzarlo en fanzine con una edición sellada y numerada.

-¿Tiene buena aceptación aquí un héroe con capirote y cirio en mano?

-Pues la verdad es que estamos bastante contentos porque el Capitán Nazareno resulta simpático y no pretende atentar contra el sector más tradicional de Sevilla y sus costumbres. Al contrario, es un defensor de lo que Antonio Burgos llamó “sevillanía” y de todo lo que esta palabra contiene. Eso sí, sin dejar de aceptar y respetar todo lo que conlleva a la modernidad y luchando contra la intolerancia y los radicalismos.

–De todas formas, con la de celosos que hay de las tradiciones, seguro que algún detractor tendréis…

 -Hombre, siempre existen radicales pero, cuando lo critican, es porque en realidad no conocen la génesis del personaje y lo que postula.

-¿Hay muchos “capitanes nazarenos” por Sevilla?

-En realidad, no. Hacen falta más personas con su espíritu aunque, gracias a él, se están descubriendo poco a poco. Los sevillanos no estamos educados para convivir con la modernidad pero inconscientemente la vamos aceptando y asumiendo como nuestra.

-Ahora toca dar el salto hacia el mundo de la webserie…

-Surgió el año pasado, cuando presentamos a nuestro personaje en el Salón del Comic, junto con otras dos publicaciones de temática cofrade, una más tradicional como “Viñetas Cofrades” y otra más transgresora, “Noctis Irae”, historia de “zombies” en la “Madrugá”. Allí congeniamos muy bien todos y conocimos a Joaquín Díaz el cual, a través de la productora Mr. Donovan Studios, nos propuso a mi hermano, que es el guionista, y a mí llevar las aventuras del Capitán a la pantalla. Hace poco menos de dos meses decidimos dar el paso y, en poco días, levantamos el proyecto. El equipo colabora de forma desinteresada y estamos deseando estrenar el capítulo piloto el 5 de octubre a los pies del Metropol Parasol junto a la calle Regina.

-¿Cuáles son las sensaciones de ver al Capitán Nazareno en carne y hueso?

-Imagínate. Hemos tenido que darle consistencia y volumen para que pareciera más profesional. De hecho, han sido dos actores los que lo han interpretado: por un lado el que recreado la identidad secreta y, por otro, el superhéroe, interpretado por un profesor de artes marciales, más fuerte y más ágil en las escenas de acción. Lo más difícil ha sido que no se le mueva el capirote y el calor que ha pasado en pleno agosto con el disfraz puesto. Pero los sevillanos han “flipado” viendo al Capitán Nazareno en plena calle.

–Un nazareno en agosto en la calle habrá llamado la atención de muchos medios ¿no?

-El primer día de grabación comencé a atender a la prensa, a radios y televisiones a primera hora de la mañana y acabé a las siete de la tarde. Muchos medios han intentado buscar el punto polémico del Capitán Nazareno y tras entender al personaje se han ofrecido incluso a participar en los próximos capítulos.

–¿En qué se parece el cómic a la webserie?

-En argumento, aunque se complementen las historias del cómic, no son las mismas que las de la webserie y viceversa. Luego, en cuanto a estética, la serie que estamos rodando tiene una línea más “vintage”, homenajeando a las películas de la “Serie B” americana y al mítico Batman de los años 60. En la webserie surgirán villanos o enemigos que no saldrán en el cómic y algunos personajes amigos, como el rey San Fernando, guía del Capitán Nazareno, tendrá acento uruguayo.

-Si el Capitán Nazareno salva a la ciudad, ¿podría recibir la Medalla de Sevilla?

-(Risas) En este primer capítulo ya la está pidiendo pero seguramente no la recogería… En cualquier caso le llevaría al alcalde su propio logo para que se imbuyera de los principios del Capitán Nazareno, si bien me parece que, la que estaría encantada de recibir este regalo, sería la Duquesa de Alba, una de las personas más modernas de Sevilla.

–Superman, Batman, Spiderman tienen su propia banda sonora… ¿A qué suena el Capitan Nazareno?

-Suena, por ejemplo, al “Thriller” de Michael Jackson que versionó la Banda de las Cigarreras (risas). Aunque Fernando Luján, la identidad secreta del superhéroe, pertenece a la Hermandad del Cristo del Metrocentro, hermandad de silencio, en la banda sonora de la webserie, que todavía no se ha grabado, sí que sonarán cornetas y tambores.

–Superman tenía la “kriptonita” como punto débil… ¿El del Capitán Nazareno?

-(Risas) Aún no lo sabe ni él. Se está creando y conociendo a sí mismo, descubriendo sus poderes… De momento sólo sabe volar y lanzar chorros de cera pero ni siquiera sabe cómo puede transformarse en superhéroe.

-Y si saltara a la “gran pantalla”, ¿qué actor podría encajar en el papel?

-Raúl Arévalo, de “Los Amantes Pasajeros” y “Los girasoles ciegos”, sería un perfecto Fernando Luján. También podría valer, por ser de la tierra, Antonio de la Torre. De lo que estoy seguro es que Ben Affleck, igual que con Batman, tampoco podría ser un buen Capitán Nazareno.