Tener un trabajo que te guste es casi tan importante como tener una pareja que te enriquezca pues, tanto en un caso como en el otro, se encierra gran parte del secreto del crecimiento del ser humano a lo largo de su vida. Por eso cuando uno da con una actividad laboral en la que se da la oportunidad, como me sucede a mí, de conocer a grandes referentes (no por ser más o menos destacados sino por su dimensión humana) y compartir con ellos inolvidables momentos, no puedes sino sentirte afortunado por ello.
Así, para la confección del número de “Sevilla Magazine” que mañana podrán adquirir junto a este periódico, “El Correo de Andalucía”, he tenido la suerte de disfrutar de alguien que conocí siendo ella una niña y que, de pronto, se ha convertido en toda una mujer –y una excelente artista- con un físico fabuloso y, sobre todo, con una atrayente sabiduría vital como es Melody. La artista, nacida en Dos Hermanas, se desplazó al Club La Motilla el mes pasado para ser percha por una tarde de “glamourosos” vestidos que supo lucir con porte de una bellísima modelo a la que siguieron muy de cerca de su padre, Lorenzo, y su novio. Muy enamorada de su pareja, Melody se descubre, en la entrevista que se adjunta al reportaje fotográfico, como alguien de sólidos valores que va pisando fuerte pero, atención, sin dejar cadáveres atrás.
A continuación, en la referida revista, encontramos a Falete, quien está ya en su casa recuperado de la lipoescultura a la que se sometió hace unos días y que, con una sola intervención, le ha librado casi trece kilos de peso. Consciente de que el tiempo vuela, y de que hay que prepararse para que, en el futuro, el organismo no pase factura por los excesos del pasado, mi querido amigo se ha puesto en manos de un profesional, Manuel Tafalla, para intentar reorganizar una dieta marcada por el caos y que, según confiesa, a partir de ahora cambiará a mejor, poco a poco. Y aunque para él nunca ha supuesto un problema la gordura –ni para ligar, ni para nada-, es evidente que, un nuevo físico, ayudará a transformarlo en un nuevo Falete al que, después de verano, esperan con impaciencia en Hispanoamérica.
Por si fuera poco, vuelve Mónica Naranjo a sorprendernos en una charla muy personal donde se confiesa “a corazón abierto” antes del concierto que, el día 28 en Fibes, ofrecerá dentro de su gira de verano. De esta forma, la intérprete se sincera sobre la relación con su marido, Oscar, y su faceta como madre y nos deja una serie de reflexiones, en todos los sentidos, muy a tener en cuenta. Coincidiendo con su cuarenta cumpleaños, “la” Naranjo se vuelve más Mónica que nunca y desata su lado más íntimo para que, por fin, el personaje que a todos nos impresiona sobre los escenarios sea más real, y cercano, que nunca.
Visto lo visto, pocas dudas albergo: me siento un privilegiado y, mientras mi profesión me dé de comer, no la cambio por otra. Dixi.