David Bisbal vuelve a Sevilla y lo hace el 20 de septiembre para ofrecer, en el Estadio Olímpico, un esperado concierto con el que tendremos la oportunidad de disfrutar del directo del que es uno de los artistas más destacados de nuestro panorama musical. Pero, ¿cómo es de veras el almeriense? Lo descubrimos a continuación a través de una carta astral que desvela todos sus secretos…

Naida Gil

“La gente que no me conoce cree que soy tímido. Los que me conocen desearían que lo fuera”. Dicen de él que era tan reservado que cuando le pedían que cantase en público, lo hacía de cara a la pared. Pero a David Bisbal nunca hubo quien lo callara. Nacido con el Sol y Mercurio en Géminis, la elocuencia y popularidad lo siguieron desde la cuna. Pronto supo sus talentos, siempre múltiples en Géminis. Tan sólo necesitaba la reafirmación externa para mejorar el concepto de sí mismo, juegos de Luna en Libra.
Pero para eso estaban sus padres. Al menor de tres hermanos, David, lo educaron bajo premisas Leo. Mensajes como somos los mejores y hay que triunfar en la vida sonaban bajo su techo. Un gran apoyo puesto que de ahí se forjó su confianza, que luego proyectaría al mundo. Y poco queda ya de aquel niño tímido que un día tembló de nervios.
Su ascendente del elemento Tierra, de naturaleza tan diferente a Géminis, le agrega persistencia para conseguir sus objetivos y serenidad en la forma de obtenerlos. Tauro necesita ganar siempre, o por lo menos sentir que no pierde. Es tolerante y cuesta verlo enojado, pero no hay que fiarse del toro manso. Ante un ataque exasperante, su Marte en contraposición con Urano olvidará la diplomacia, dispuesto a desplomar con su arsenal de argumentos a cualquier interlocutor inoportuno.
Lo mejor que le puede ocurrir a sus planetas Venus y Marte, es que nadie les moleste. Es sociable la mayor parte del tiempo, pero su mente necesita hacer gimnasia a diario. A solas. Tiempo para conectar consigo mismo y estar en paz. Su relación con el placer es estupenda: no tiene que buscarlo, lo atrae.

Trabajo

La profesión lo eligió cuando era muy niño. Venus en Tauro siempre juega a ser cantante, aunque sea en la intimidad. Pero la suya era más que una afición, la música era pura vocación. Su herencia familiar Leonina lo predisponen a la teatralidad y centralidad. No nació para papeles secundarios. Mercurio como rey de sus talentos, junto con el Sol, habla de una persona que vale para vivir de sus cuerdas vocales. Pero además su mensaje tiene apoyo social. No hay más que ver los fans y números de ventas que ha conquistado desde que lanzó su primer álbum en 2002.

Amor

Venus en Tauro cree en el amor eterno y su finalidad es conquistar seguridades. Para él, amar es poseer, y las posesiones, o son eternas o no son posesiones. Neptuno le hace soñar con el matrimonio, pero su mala relación con Mercurio destapa una desconfianza innata hacia la proyección de futuro con sus parejas. Si decidiera casarse, pondrá cláusulas matrimoniales.

Lo esencial para seducirle es actuar sobre sus afinados sentidos: los aromas, colores vivos y las voces melódicas lo encandilarán. Pero mejor no jugar a ser la mujer amazonas. No importa que una sea híperinteresante, si no encuentra .en ella ninguna satisfacción sensual, le hará bostezar.

El artista junto a su más reciente amor, la argentina Eugenia Suárez, ‘La China’.

Destino de vida

Vive en clave de presente porque teme que porvenir signifique lo que está por venir y no hacia donde voy a ir. Su consuelo es ceder el futuro a su suerte en las relaciones amorosas. Más bien, confía que cuando esté con la mujer de su vida, empezará a cumplirse su destino, tal y como lo tiene previsto. Una visión desdibujada puesto que Acuario en la cima de su tema natal promete mil y una sorpresas que cambiarán su monótona hoja de ruta. Noticias inquietantes para un ascendente Tauro, porque los únicos cambios que le gustan son los que propicia él.

Filosofía de vida

Capricornio en su tema dicta una filosofía de vida realista, donde no caben ciegas esperanzas. Su máxima es hacer para obtener. Tiene un estilo de vida sencillo. Camina mirando al suelo más que al cielo. Para no alejarse de quien es y lo que ha sido su vida. Actúa motivado por resguardos materialistas y va en busca de reconocimiento social, su meta vital.