Un festival que también es un balón de oxígeno cultural y económico para el teatro clásico y para la ciudad de Mérida. El Festival de Teatro Clásico de Mérida rompe todas las previsiones y supera este año en un 5,5 por ciento la pasada edición con 179.122 asistentes a todas sus actividades y un superávit de un millón de euros sobre una recaudación de 2.622.550 euros, un 6,3 por ciento más que la del ciclo de 2023. Unas impresionantes cifras al frente de las que está Jesús Cimarro como director de un evento que, más allá del teatro romano, se extiende a Madrid, Medellín, Regina, Cáparra incluyendo diferentes tipo de representaciones, exposiciones y actividades.
En este verano se ha contado con “estrellas” como Victoria Abril, Joaquín Reyes, Anabel Alonso o Rafael Álvarez, “El Brujo” para una programación en la que ha habido títulos como “Medusa”, “La Paz” o “Ifigenia” y en la que no han faltado ni ópera, ni danza contemporánea, colgando el cartel de “No hay localidades” en 31 ocasiones.
70 aniversario del Festival y última concesión a Pentación, la productora de Cimarro, para la gestión de un gigante que se ha convertido en el gran atractivo para viajar a la capital emeritense en julio y agosto, a pesar de las altas temperaturas, en una auténtica peregrinación para una experiencia inolvidable de la que se hacen eco medios y redes sociales, también con un destacable aumento en seguidores y alcance con respecto a momentos anteriores.
Toca hacer balance personal y profesional y esperar que para 2025 nos volvamos a encontrar al exitoso equipo responsable de que este sueño de muchas noches de verano, sea una realidad.