Y con ella llegó el escándalo. Amor Romeira es una amante incondicional de Sevilla y de su feria y lo demuestra cada año acudiendo varios días al Real y disfrutando de nuestra gente y nuestra tierra siempre vestida con modelos que llaman la atención y que generan polémica. Como el rojo de José Perea que la canaria lució apoyándose en su fuerte personalidad, capaz de defender apuestas tan arriesgadas como ésa, de tul y transparencias, que generan gran controversia entre el público.



Más allá, Amor inauguró la Feria con un diseño de José Paco Couture, negro y con volúmenes en las mangas, muy en la línea de lo que la moda dicta en la actualidad y mucho más discreto de lo que Romeira suele utilizar. Con Nuria Carmona siguió la línea de la valentía en una pieza muy especial, palabra de honor con volantes inferiores en el escote y mezcla de blanco y negro y transparencias color nude en los laterales, dando la sensación de desnudez en esa zona.

Por último, Adelina Infantes se convirtió en otra de las creadoras que vistió a la colaboradora de Telecinco, de nuevo con escote palabra de honor para un vestido oscuro con lunaritos rojos en el que se potenció la cintura de la artista con un cinturón de cuero rojo. Comodidad para el tramo final de una Feria muy vivida y para la que, en general, Amor ha preferido las flores rojas en diferentes versiones: claveles o rosas en el centro de la cabeza o enmarcando su rostro en el que no han faltado grandes pendientes como complemento. En ella más es más…
