El mutifacético actor estadounidense cumple hoy 51 años en espera, el 19 de junio, del estreno del ‘thriller’ de ciencia ficción “Trascendence” y mientras continúa con el rodaje de “Black Mass”, donde ha recibido la visita de su novia, Amber Heard, más joven que él y una de las mujeres más impresionantes de Hollywood.
John Cristopher Depp II es el verdadero nombre de este actor, productor, músico y pintor que ha sido tres veces nominado al Oscar y ha ganado un Globo de Oro, un premio SAG y un César durante una carrera consolidada que cuenta con grandes éxitos de taquilla como los de la saga “Piratas del Caribe”, “Alicia en el País de las Maravillas” (de la que pronto comenzará a rodar una secuela) o “Charlie y la fábrica de Chocolate”. Y es que su trayectoria está plagada de personajes tan dispares entre sí como el doctor “Will Caster”, el investigador más importante del mundo en cuanto inteligencia artificial al que da vida en la cinta “Transcendence”, cuyo estreno tendrá lugar el próximo jueves, una semana después de su soplar las velas de su cumpleaños.
Y aunque ya parece haber encontrado la serenidad, su vida ha estado llena de altibajos desde su nacimiento. De ascendencia francesa, alemana, cheroqui e irlandesa, él mismo se califica como un “perro mestizo” que vivió en más de veinte lugares hasta que sus padres se divorciaron siendo adolescente. A los 16 años su madre le regaló su primera guitarra y formó el grupo “The Flame”, con el que empezó a tocar en bares y ganar algo de dinero aunque sin grandes logros (por lo que tuvo que trabajar como asistente en una gasolinera y vendiendo corrales sin abandonar esta pasión por la música). Poco después conoció a Nicolas Cage, quien lo convenció para ir a la audición del “film” de terror “Pesadilla en la calle del infierno”, donde tuvo su debut como una de las víctimas de “Freddy Krueger”, seguido éste por títulos como “Platoon” y “Sleepy Hollow”.
Sin embargo, Depp quiso probar otros sectores profesionales y fue copropietario de un bar en Los Ángeles, “The Viper Room”, al que los críticos llamaban “la cuna de la marihuana”. Una experiencia tras la que comenzó “la etapa oscura de su vida” en la cual asistía a ciertas fiestas liberales o hasta fue detenido por destrozar una suite en Nueva York y terminar saltando por la ventana con la excusa de haber encontrado un armadillo en el armario. Antes de todos estos escándalos se había casado con la maquilladora Lori Anne Allison, de quien se divorció en solo dos años, y había salido con las actrices Sherilyn Fenn, Jennifer Grey y Winona Ryder, y con la modelo Kate Moss. No sería hasta 1998 cuando comenzó su relación con la actriz y cantante francesa Vanessa Paradis, junto a quien tuvo una hija y un hijo. La familia, que dividía su tiempo entre América y una campiña al sur de Francia, compró una isla en las Bahamas antes de separarse en 2012.
Actualmente parece encontrarse en armonía junto a la estadounidense Amber Heard, de 28 años de edad y que se ha convertido en una “sex symbol” en los últimos tiempos. La intérprete se ha consolidado como una de las mujeres más impresionantes de Hollywood gracias a unos increíbles ojos claros con los que se “come” la cámara con una mirada entre adormilada y sensual -que rememora incluso a Marylin Monroe-, su melena rubia y un cuerpo de infarto. Encumbrada como una de las mayores bellezas del “séptimo arte” actual, no duda en mostrar su amor en público por su novio, como hace unos días durante el rodaje de la última película de Depp, “Black Mass”, para la cual Johnny se ha teñido el cabello de claro y luce una sorprendente calva con intención todo ello de transformarse en un agente del FBI mayor dentro del que es en uno de sus papeles más realistas.
Un rol que contrasta con los extravagantes personajes a los que nos tiene acostumbrados y para los que tiene que pasar por impresionantes cambios de imagen que suelen ser noticia tal y como pasa con el histriónico pirata Jack Sparrow, el indio Toro en “El llanero solitario”, el Sombrerero Loco o el memorable “Eduardo ManosTijeras”, primera de las ocho producciones de la mano del director Tim Burton que, desde el principio, lo tomó como protagonista “fetiche” forjando una simbiosis que es una cuasi garantía de éxito bajo la que nacen universos fantásticos a partir de insólitas ideas.
Al fin, un hombre enigmático que aporta a sus trabajos un excepcional carisma que, si bien podría no ser el mismo en su día a día, sabe simular muy bien en la “gran pantalla”. Ahí, pese a haber cumplido 51 años, parece haber encontrado el secreto de la juventud eterna…
