Liderado por el doctor Francisco Ortiz y Arancha del Pino, el equipo de Teknobell es una de las bazas más destacadas de la que, desde Los Remedios, es una de las clínicas estéticas de referencia en Sevilla
Francisco Ortiz, 60 años
Director Clínica Teknobell
Acaba de celebrar seis décadas de vida -con una fiesta “sorpresa” que le preparó su esposa-, y no puede hacer mejor balance personal y profesional, terreno donde se ha convertido en uno de los doctores más veteranos y respetados dentro y fuera de Sevilla. “Mi sensación es la de haber recorrido junto con mi equipo una curva de aprendizaje muy importante en los últimos quince años y que la experiencia acumulada nos ayuda a conseguir unos resultados estéticos excelentes. El conocimiento atesorado en este tiempo, y la implicación diaria de todo mi entorno laboral, nos permiten marcar diferencias con la competencia y disfrutar de la satisfacción de los pacientes que confían en nosotros”. Eso sí, las preocupaciones siguen estando presentes, y más en un mercado, el de la estética, donde hay que tener mucho cuidado con las manos en las que depositamos nuestra confianza. “Hay estudios que afirman que en los próximos ocho años, el mercado de la Medicina Estética crecerá a nivel mundial un 160 por ciento, pero resulta paradójico que, a pesar de la creciente demanda del sector, no exista un mayor control por parte de las autoridades para evitar el intrusismo, las estafas, tratamientos en centros no autorizados o en pisos… Una gran cantidad de irregularidades que no deben ser permitidas en un país como España, que presume de tener uno de los sistemas sanitarios más avanzados del mundo”.
Arancha del Pino, 43 años
Socia y gerente de Clínica Teknobell
Oficialmente vinculada a esta empresa desde hace un año, la que también es esposa del doctor Francisco Ortiz se encarga de la parte administrativa de una empresa que, desde el 12 de diciembre de 2018, ha crecido un 68 por ciento. “Desde fuera las cosas se ven más fáciles. Yo trabajaba para un laboratorio que servía productos a Teknobell pero no es lo mismo que estar aquí en el día a día”. Y así, en la actualidad trata con pacientes, con bancos, con la notaría, proveedores… Un sinfín de gestiones que, no obstante, le dan muchas satisfacciones utilizando siempre, eso sí, solo productos de alta calidad, algo que le diferencia de muchos nombres del sector. “Le prometí a Paco que sentaría las bases para 2020 con una estrategia que, poco a poco, ha dado sus resultados”. Respecto al hecho de compartir pareja y trabajo, Arancha se muestra tranquila, a pesar de que haya que establecer límites. “El acuerdo es que ninguno de los dos se metería en la zona laboral del otro”.
María Rodríguez, 37 años
Recepcionista
Es la más reciente incorporación al equipo de la Clínica Teknobell y, aunque viene de la medicina, es la primera vez que tiene contacto con la estética. “Es un mundo impresionantemente apasionante. Estoy aprendiendo mucho y me encuentro muy impactada por todos los tratamientos que existen para mejorar nuestro físico y con las maravillas que aquí se hacen. Todos los pacientes se marchan con una sonrisa y eso es muy, muy satisfactorio”.
Carmen Ruíz, 48 años
Auxiliar de clínica
Entre dermatología y medicina estética lleva tres décadas trabajando -14 de esos años con Francisco Ortiz– y aplicando en la actualidad, sobre todo, diferentes tipos de láser con diferentes aplicaciones. “Utilizo muchas máquinas nuevas que van saliendo y que nos permiten quitar mancha, eliminar el vello o remodelar el cuerpo. Contamos con el Láser Soprano, que proporciona una depilación definitiva (con cinco o seis sesiones eliminamos todo el vello). Aparte está la Luz Pulsada, ideal para estas fechas sin sol y para borrar las manchas de la piel a las que me refería. Eso sin olvidar técnicas para reafirmar tejidos y acabar con la celulitis, algo que se agradece cara a la primavera, cuando nos quitamos la ropa más tapada de invierno”.
Julia Arellano, 39 años
Auxiliar de clínica
Lleva nueve años con el doctor y, aunque es Técnico en Anatomía Patológica, cuando conoció a Francisco Ortiz se enamoró de este pequeño universo lleno de posibilidades. “El trato cercano que tiene Paco con el paciente hace que éste se sienta seguro y eso, para mí, es lo más destacable de su labor. No solo busca la perfección en el tratamiento, sino que exista una implicación con cada persona, que se sientan a gusto y que confíen en sus consejos”. Más allá, Julia reconoce que es una apasionada del Vistabel (Botox) y del ácido hialurónico ya que, para la remodelación facial, son “brutales” los cambios obtenidos.
Guada Gómez, 44 años
Esteticista
Estética de cabina y todo tipo de tratamientos faciales y corporales (como la carboxiterapia), junto a la ayuda que sea necesaria en el día a día conforma el amplio abanico de servicios avanzados que presta esta profesional que, con los pacientes, lleva a entablar relaciones de auténtica amistad. “Vienen mujeres pero también muchos chicos que se hacen desde limpiezas faciales a cualquier otro tratamiento”, comenta Guada quien, además, confirma cómo su labor también tiene tintes psicológicos a la hora de animar a todo el mundo para que esté seguro y tranquilo. “Al final, lo ideal es apostar por la naturalidad, dentro de tu estilo. Es la mejor publicidad y la mejor carta de presentación”.
CLÍNICA TEKNOBELL
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