Por Ricardo Castillejo
El final de la pasarela de SIMOF deja en el aire el buen ambiente de cuatro días de moda flamenca que inauguran una temporada que se prevé apasionante
Con los clásicos rojo y negro, lunares y volumen en las mangas arrancó la mañana de ayer en SIMOF a través del desfile de Yolanda Moda Flamenca donde asistimos a una presentación, sencilla pero efectiva, tras la que se dio cabida al desfile colectivo de la provincia de Málaga en la que el negro también fue una de las constantes de su tiempo.
La firma De lunares y volantes combinó precisamente lunares con estampados y faldas con vuelo y blusas transparentes de gasa junto a un elegante modelo ceñido con aberturas laterales confeccionado en un glamouroso tejido de brillo.
Por su parte, Rosapeula flamenca se inspiró en el mar para un conjunto fantástico, entre los azules y los verdes, con mucho brillo y patrones en los que hubo cabida para transparencias, grandes escotes corazón, cuerpos sin mangas ribeteados, en escote y al lateral, con un volante, dos falsos dos piezas unidos por el ombligo y la espalda… Imaginación y buen gusto para “Agua salada”.
Bordados Manuela Romero presentó deliciosos mantones de Manila y Francisco Tamaral, Premio Aromas de este año, sorprendió como siempre con sus cortes horizontales en capas de volantes, blusas flamencas con pantalones palazzo o faldas con blusas de tul y amplitud en mangas abullonadas.
En cuanto a las Hermanas Serrano, sus flamencas “de toda la vida” nacieron entre encajes y pequeños lunaritos acompañados del mantoncillo que, esta temporada, es tendencia.
Con Noelia López como invitada de la jornada, y Marisa Jara de “estrella” del pase, María Ramírez Flamencas viajó a Italia para “La piú Bella”, exuberante visión de la mujer con abundancia de tules y plumas, encajes y sexys escotes.
A continuación, Sergy Garrido & Tapiju dieron forma a una fantástica puesta en escena con proyecciones en las pantallas provocadores blancos perforados, dos tonalidades de malva para el cuerpo y los volantes o mostazas con sobrecuerpo de encaje caldera con capucha igualmente de encaje.
Más tradicional, Carmen Latorre desplegó su personal homenaje a Klint con azules tinta que terminan en azules marinos con dorados, amarillos y verdes con lunares azules. Eso en cuanto a los colores, encontrando en sus cortes una manga ablusonada combinada con un brazo con una manga corta que pudiera parecer un clavel de grandes dimensiones o una capa de encaje sobre unos bajos con varias hileras de volantes.
En la recta final, Rosa Pedroche tapó los rostros de algunas modelos con flecos para cuerpos rojos con volantes cruzados por todo el frontal. Eso, junto a estampados florales y “print” animal, amplios volantes de tul y fusión de grandes lunares negros con flores superpuestas en fondos blancos.
Muy actual y atractivo y buen preludio para el fin de fiesta que ofreció la Asociación Mof&Art que, con integrantes como Pilar Vera, Sara de Benítez, Carmen Acedo, Morlote Complementos o Filigrana, dijo adiós a un 2020 en el que, igual que en la moda urbana, ya no hay una tendencia concreta, siendo cada persona la que marca su propio camino en el vestir. Por eso mientras más opciones, mejor…