La artista suena por todos lados con “La niña de la escuela”, uno de los temas contenidos en “La Niña”, el nuevo álbum de esta madrileña criada en la localidad granadina de Huétor Tájar a la que hoy nos acercamos a conocer mucho más en profundidad…
Ricardo Castillejo
Tiene un olfato especial para detectar un posible éxito musical y a las pruebas nos remitimos. “La niña de la escuela” es una de las canciones del verano y solo la primera de las que contiene “La niña”, el álbum con el que Lola Índigo, después de dos años de intenso trabajo, vuelve a sorprendernos. En él, colaboraciones como las de TINI, Rauw Alejandro, Don Patricio o Mala Rodríguez arropando a la que, a sus 29 años, es sin duda una de nuestras figuras actuales más admiradas. Muy atrás quedan ya “Operación Triunfo” o “Tu cara me suena”, plataformas que le han dado una popularidad que ella no ha hecho sino aumentar basándose en su talento como artista y en una contundente personalidad con claras ideas como las que expone en esta entrevista.
-Tienes un sexto sentido para detectar un hit, ¿verdad?
-Eso dice mi mánager, Magic, que tengo muy buen oído para eso. Como también he escuchado mucha música… Lo que sí debe ser algo fresco porque yo no me enamoro de las canciones genéricas, sino de las que tienen algo de magia como “La tirita”, de Belén Aguilera.
-¿Es necesario, para triunfar hoy día como intérprete, algo más que saber cantar?
-Sí. Saber comunicar. Hay gente, poca, que apenas da entrevistas, pero en mi caso estoy más expuesta, aún con el riesgo de cagarla más. Sea como sea, también pienso que puedo ayudar más, con lo que prefiero no ser tan políticamente correcta y mantenerme en primera línea de batalla.
-De hecho, protagonizaste hace poco una polémica con el doblaje de una película del que se ha hablado mucho…
-Me equivoco y aprendo, pero también mis palabras se sacan de contexto y eso es muy peligroso. Es agotador tener que medir todo lo que dices y pasarte noches llorando por algo que te afecta y que sufres. No hago nada con mala intención.
-¿Cuál ha sido la lección en este caso?
-No está mal dejarse llevar por la ilusión, aunque también me sentí muy engañada por quienes me metieron en ese embrollo. Hablé con la persona a la que le hice daño y eso debe quedar entre las dos.
“Amar y querer es muy diferente. Cuando amo a alguien genuinamente lo quiero dejar libre, por eso cada vez se dan más relaciones abiertas (aunque yo no las he tenido)”
-¿Qué estás dispuesta a sacrificar por tu arte?
-Todo, lo que pasa que también está lo que mi familia tenga que leer y escuchar. Nunca pretendo dañar a nadie, pero en ocasiones sales a dar una explicación y recibes un ataque. Cuando me metí en esto lo hice para dar oportunidades a otr@s, construir algo positivo y colaborar tanto personal como culturalmente. Si no lo consigo, el éxito mío personal no me suma ni me sirve y, cualquiera que me haya seguido, debería saber que pienso así.
-Si tuvieras oportunidad de encontrarte cara a cara con la niña que fuiste, ¿qué le comentarías?
-La dejaría seguir. Nunca tuve intención de rendirme. Tenía muy claro lo que quería ser y hacer y jamás hubiera imaginado tantas cosas ocultas en todo esto, como no poder mantener mi vida cotidiana.
-Una de las fantasías sexuales masculina era una mujer vestida de niña, imagen que muy mal vista en la actualidad pero que ha existido. ¿Te da pudor hablar de sexo? ¿Cómo afrontas esta cuestión?
-Hay una edad a la que empezar a vivir la sexualidad, en mi caso bastante adulta. Yo lo contemplo libremente. La desnudez y la sexualización son dos conceptos distintos. No me gusta que el pecho se sexualice, pero me dicen que es un órgano sexual y he tenido muchos conflictos por ese tema incluso con parejas mías. Por eso no están… No quiero permanecer al lado de nadie que me señale qué es decente o digno de respeto.
-¿Y el amor? ¿Desde qué perspectiva lo ves?
-El amor tiene que ser cada vez más libre, desinteresado, querer lo mejor para otr@. Amar y querer es muy diferente. Cuando amo a alguien genuinamente lo quiero dejar libre, por eso cada vez se dan más relaciones abiertas (aunque yo no las he tenido). El concepto de “Hasta que la muerte nos separe” nació en tiempos en los que nos moríamos muy pronto, pero ahora tenemos un camino tan largo que llegamos a ser muchas personas diferentes en una misma vida. Son muchos estímulos, mucha información que incitan al cambio y al continuo aprendizaje.
“No creo que tenga mucho glamour. La única vez que me he sentido glamourosa fue en los premios MTV, donde me pusieron un vestido muy grande pero, al terminar, me coloqué unas botas de cordones negras por debajo y me fui así a la fiesta”
-Cada vez más jóvenes aceptan que se pueden enamorar lo mismo de un chico que de una chica…
-Yo soy abiertamente bisexual, algo que no me suelen preguntar porque no ha hecho falta. Desde siempre me han gustado las mujeres igual que los hombres. En mi familia hay una mentalidad muy abierta y de hecho he escrito en el disco una letra a una chica que se llama “Killa”.
-¿Es diferente amar a uno o a una?
-Amor es amor, aunque con las mujeres vivo un amor más libre. Nunca ninguna me ha puesto entre la espada y la pared ni me ha hecho sentir que soy solo para ella. Creo que, después de una relación, es más fácil tener una amistad con una chica que con un chico.
-¿Eres una diva gay?
-No lo sé. Me siento parte del colectivo y, mientras pueda transmitir un mensaje… Mis fans saben de mi sexualidad y está bien que haya referentes LGTBI. Encontrar personajes como Jedet en televisión es algo genial.
-¿Y diva, en general? ¿Glamour?
-No, no. No creo que tenga mucho glamour. La única vez que me he sentido glamourosa fue en los premios MTV, donde me pusieron un vestido muy grande pero, al terminar, me coloqué unas botas de cordones negras por debajo y me fui así a la fiesta. Todo el mundo me miraba…
-Has compartido duetos con muchos artistas… ¿Se puede, en tu profesión, ser compañero y amigo?
-Por supuesto. Tengo muchos amigos muy de verdad, desde Aitana a Belén, con la que comparto el día a día. O Mala Rodríguez, con la que me escribo casi a diario.
-¿Eres consciente de que, quienes las ideas tan claras como tú, intimidan?
-Supongo. No es mi intención. Intento inspirar y ayudar y nada más. Es mi única meta en la vida.
-Pero para conquistarte eso echa para atrás…
-Siempre he pensado que sí. Siendo cantante, de primeras es atrayente y luego te intentan apagar por el miedo y eso es feo. ¿Ya me has conocido así y cuando me tienes al lado intentas hacerme sentir inferior para sentirte tú poderoso? Es muy triste y una de las peores decepciones que he sufrido. A veces hay que mirar desde la distancia porque, cuando estás metido en esa rutina, no te das cuenta de la toxicidad. ¡A tomar por culo la gente tóxica!
-¿En qué te fijas tú a nivel amoroso?
-En alguien especial, raro… Que, como esa persona, no exista nadie. A veces son demonios que te dejan cicatrices, pero tengo ese “síndrome de Wendy”, de cuidadora y no quiero cambiar esa naturaleza porque hay quienes se lo merecen.