Lo había anunciado a bombo y platillo pero, según ha contado el DJ en “Socialité”, finalmente no irá hoy a ver a Isabel Pantoja. Tras la reconciliación que madre e hijo hicieron en “Cantora”, cuando Kiko fue a consolar a su progenitora coincidiendo con el fallecimiento de su abuela, todo el mundo esperaba que, en esta festividad de Todos los Santos, Rivera regresara a la casa familiar.
Sin embargo, un poco más de un mes después de la muerte de doña Ana, la tradición que “los Pantoja” tienen de reunirse en esta jornada, se ha roto dentro de una relación maternofilial que sí parece hay intención de recuperar. De hecho, la tonadillera y su primogénito se fundieron, llorando, en un abrazo de quince minutos que venía a enterrar el hacha de guerra levantada por Kiko después de enterarse de determinados movimientos económicos de Isabel en torno a la herencia de Paquirri.
Eso sí, lo que el DJ no quiere abandonar es su marca, “Kantora is mine”, que, lejos de cerrarla, ha aclarado está en fase de reformas en lo que al logotipo y diseños se refiere. Si bien parece ser que a Isabel no le hacía mucha gracia esta vía de negocio de su niño, éste seguirá adelante con ella. Como dice el refrán, “el que la lleva, la entiende”.